Actuar y dejarse llevar con fe y
convicción en pos de un ideal. Pero ese ideal para asumirlo y actuar en
consecuencia, te llega por una gracia divina?, la creas?, la eliges?
En mi pasado tuve la convicción
de alcanzar un lugar destacado en el deporte, en otra etapa la tuve para
arribar a las metas como estudiante, creí en poder transformar una sociedad
hasta un grado de equidad y justicia, o de hacerla como madre.
Conseguida una meta ha sido
preciso pasar a otra etapa con su propio fin; hasta ahora habían estado en una
secuencia llegada precisamente por gracia divina, o por hitos sociales, o por
secuencia en sucesión de la edad.
Hoy, un fin y la fe de alcanzarlo, ya no parece
llegarme más como dádiva de la vida, pero se que puedo construirlos. Veo a mi
alrededor a todas las personas creativas que se comprometen consigo mismas y me
parecen como una guía para armar el rompecabezas que habrá de constituirse en
mi nuevo derrotero; tengo los recursos y la voluntad para fluir hacia ellos.
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